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Desde 2016, todas las empresas que opten a determinados contratos ante cualquier entidad del sector público tienen derecho a utilizar el documento europeo único de contratación (DEUC). Se trata de una declaración sobre la situación financiera, legal y técnica por parte de las empresas para acceder a determinadas licitaciones. Como bien se ha dicho, es una posibilidad que tienen las empresas y en ningún caso es una obligación.

Esta herramienta supone un gran ahorro de tiempo y de trámites burocráticos a las empresas que deseen concurrir a un concurso público, en comparación con la situación anterior. Esto es así porque solo el adjudicatario final es el que va a tener que presentar todas las certificaciones exigidas y la documentación pertinente a la hora de firmar. Es cierto que, ante alguna duda, el contratante puede solicitar una determinada documentación a una empresa que desee licitar, pero es la excepción y no la regla.

No es la única ventaja del DEUC; este instrumento es válido para toda la Unión Europea y se puede reutilizar tantas veces como se desee, siempre que cumpla con los requisitos particulares de cada proceso. Además, posee un formato electrónico y basta con este a la hora de presentar la oferta en el primer sobre.

¿Qué incluye el documento europeo único de contratación?

En principio, el DEUC incluye todas las declaraciones responsables que se suelen pedir, tales como estar al día de las obligaciones fiscales y laborales o no tener causas penales pendientes.

Además, se acredita que la empresa puede demostrar que cumple los requisitos que la ley exige para ser contratada. Eso incluye tanto la demostración de su solvencia económica y financiera, como su capacidad técnica y profesional. También realiza un reconocimiento en negativo en el sentido de no estar incapacitado para ser contratado.

La importancia de las listas oficiales: el ROLECE

Para la Directiva 2014/24/UE, las listas oficiales son los registros que las distintas administraciones organizan para sus empresas licitadoras. Así, en España sería el Registro Oficial de Licitadores y Empresas Clasificadas del Estado (ROLECE) o el correspondiente autonómico.

A la hora de rellenar el formulario del documento único de contratación, las empresas solo están obligadas a facilitar la información que no figure en el ROLECE o que no esté actualizada. Eso sí, deben incorporar los datos para que el órgano de contratación pueda acceder a los datos de su perfil. Para ello deben facilitar la dirección de internet, la identificación del usuario y, si procede, una declaración de consentimiento.

-> Más sobre cómo rellenar el formulario ROLECE…

¿Cuál es el ámbito de aplicación del DEUC?

En principio, son los órganos de contratación quienes deben señalar si para una licitación en concreto se puede presentar este documento. Si es así, las empresas aspirantes deben cumplimentar el formulario normalizado, aprobado por la Comisión en 2016.

La regla general, por su parte, señala que los procedimientos susceptibles en los que se puede aplicar deben ser abiertos, restringidos, negociados con publicidad o de diálogo competitivo.

Además, debe tratarse de un contrato que merezca la consideración de sujeto a regulación armonizada, según la Directiva 2014/24/UE. Esto es, un contrato que, por alcanzar determinado umbral en su valor estimado, se someten a unas reglas especiales en cuanto a publicidad y procedimiento. Pueden ser:

  • Contratos de obras, suministros y servicios.
  • Contratos de obras y servicios subvencionados.
  • Contratos de colaboración entre el sector público y el sector privado.

Así, no se aplica esta herramienta a los contratos que no están sujetos a regulación armonizada, pero tampoco a los contratos de concesiones de obras y de servicios. Respecto al procedimiento negociado sin publicidad, solo se aplicará siempre y cuando no suponga una carga burocrática mayor o no se considere inadecuado.

-> Más sobre cómo rellenar el formulario DEUC…

 

¿Qué es una Licitación Pública Electrónica?

La creación del DEUC fue la antesala de un plan mucho mayor a la hora de contratar con las distintas administraciones. El plan de acción europeo para los años 2016 a 2020 pasaba por implementar la administración electrónica o lo que se denominó e-government.

Las razones fueron diversas. En un mundo dominado por la tecnología, era paradójico que la burocracia continuara anclada en el siglo XIX y seguir echando por tierra cuatro de sus principios fundamentales: transparencia, economía, eficacia y eficiencia. Por otro lado, la apuesta de la Unión Europea se dirige a garantizar de forma efectiva la igualdad de oportunidades en los procesos de contratación, en un claro respaldo a las pymes. No hay que olvidar tampoco el compromiso europeo con el medioambiente para conseguir, en la medida de lo posible, papel cero.

La Licitación Pública Electrónica es una consecuencia de todo lo anterior. Se trata de la presentación de una oferta de manera telemática. En España, desde 2018 es obligatorio presentarla de forma electrónica. Entre sus principales beneficios para ambas partes están el ahorro de tiempo, de espacio y de recursos técnicos.

Plataforma de licitación electrónica

El uso de una plataforma de licitación electrónica no solo aumenta la concurrencia de empresas en los distintos procesos, sino que facilita información útil sobre las licitaciones publicadas a sus usuarios. Además, agiliza tanto la comunicación entre las partes como la consulta de los expedientes, incluso la adjudicación.

Todas las administraciones, especialmente, los ayuntamientos y diputaciones deben dotarse de una solución de licitación electrónica eficaz que permita la digitalización de proceso completo de tramitación del expediente hasta la resolución. Estas plataformas constituyen la repuesta. Se trata de proveedores de servicios de contratación pública que están al día de los cambios legislativos y ofrecen todas las herramientas que el licitador y la administración contratante requieren, entre ellas, el documento oficial de contratación.

Requisitos para las licitaciones electrónicas en España

Los licitadores deben cumplir tres requisitos:

  1. Estar registrados en la plataforma de contratación del sector público (PLACSP).
  2. Poseer conexión a internet y disponer de una versión de Java actualizada.
  3. Disponer de un certificado electrónico reconocido oficialmente por las administraciones.

En definitiva, el DEUC es una herramienta que abre las puertas al cambio de paradigma en las administraciones públicas en su trato con los licitadores. Es una apuesta firme por la transparencia, la igualdad de oportunidades para ser contratados por ellas, la información, la eficiencia y la sostenibilidad.

Redactado por: José Pérez Barrozo